¿Estás ayudando a tu hijo a dejar el pañal? ¿Buscás orinales? Hoy en día tenés muchas opciones para elegir: hay orinales (bacinicas, bacinillas o pelelas) para apoyar en el suelo, orinales convertibles, banquitos que se hacen orinales, orinales con manijas, orinales con almohadones, asientos que se colocan sobre un inodoro para adultos, asientos que se elevan y permiten a los adultos usar el mismo inodoro, asientos decorados y acolchados y asientos con agua y patitos flotando en su interior.
Y eso sin mencionar un orinal musical que reproduce una melodía cuando corre el agua. Sin embargo todo esto no soluciona nuestra inquietud:
¿Qué orinal elegir debo elegir?
Empecemos por lo básico, el principal elemento que necesitás es el que ya tenés: el inodoro. Sin embargo, actualmente muchos pediatras y padres recomiendan no usar directamente el inodoro, ya que puede ser intimidante.
A continuación te brindamos tips básicos para ayudarte a elegir el Orinal ideal para tu niño.
Incluí a tu hijo en la selección del orinal
Es mejor comenzar con un orinal que tu hijo puede hacer suyo. Algunos padres han descubierto que si un niño ayuda a elegir su propio orinal, hay más probabilidades de que lo use.
Tamaño del orinal
Un orinal que se coloca sobre el suelo tiene ciertas ventajas para un niño. Su tamaño es pequeño, tal como él. Es de muy fácil acceso, por lo que puede aprender a sentarse sin ayuda, y no requiere apretar el botón para que corra el agua.
La altura apropiada de un orinal de apoyo en el suelo significa que tu niño puede apoyar firmemente los pies en el suelo.
Buscá un orinal que posea una base lo suficientemente ancha para evitar que se vuelque cuando tu niño se incline hacia un lado para verificar su progreso.
Adaptadores de asientos para inodoros
Si tu hijo está intrigado por el inodoro y quiere usarlo tal como mami y papi lo hacen, entonces podés elegir un adaptador que se coloca y fija en el asiento.
Asegurá que el asiento esté firme y no se sacuda, ya que si no está fijo tu hijo puede sentirse inseguro de usarlo. Algunos pediatras recomiendan este tipo de asiento porque hace que la transición al inodoro común sea más sencilla.
Incluí un banquito escalera
Si elegís un adaptador para tu inodoro, asegurate también de invertir y adquirir un banquito escalera para colocar junto al inodoro. Esto permitirá que tu hijo pueda estar estable cuando hace fuerza durante la evacuación.
También necesitará menos ayuda para subir y bajar. Un banquito escalera puede cumplir doble función en el baño: después de usarlo en el inodoro, tu hijo puede acercarlo al lavamanos para higienizarse las manos.
Orinales de doble función
Algunos orinales para niños ofrecen lo mejor de los dos mundos, con asientos que se elevan y se fijan en el inodoro cuando el niño está preparado para usarlo. Otros se pliegan y funcionan como banquito escalera.
Cualquiera sea el modelo que elijas, asegurate de optar por uno que sea resistente, debe ser liviano de forma que tu hijo lo maneje, pero lo bastante firme como para sostener todo su peso.
Los orinales independientes y los modelos de fijación en inodoro deben tener un asiento acolchado o del tamaño adecuado para los niños.
Pañales de aprendizaje, toallitas húmedas y más
Algunas mamás usan pañales de aprendizaje desechables, que lucen semejantes a la ropa interior, para ayudar a los niños a acostumbrarse a bajarse y subirse estas prendas.
Son más cómodos que los pañales y también implican menos trabajo para mamá si hay accidentes (que siempre ocurren), y el niño puede ayudar a desecharlos él solito.
Cambiar los pañales por los pañales de aprendizaje desechables puede ser un hecho importante para un niño que está en el proceso de usar ropa interior, pero que mientras tanto requiere protección adicional.
Algunas mamás usan este tipo de pañales de aprendizaje por las noches en lugar de los pañales, una vez que sus hijos pueden mantenerse secos durante el día, pero incluso así ocurren accidentes durante la noche.
También le estás enseñando sobre limpieza, ayudándolo a limpiarse y mostrándole cómo lavarse las manos cuando usa el orinal.
Las toallitas húmedas pueden simplificar el trabajo para tu hijo: son más fáciles de manipular para sus manos pequeñas durante la limpieza y pueden limpiar más que el papel seco. Buscá las toallitas húmedas que pueden arrojarse al inodoro.
Si bien no es posible apurar el proceso, podés ayudar a tu hijo a realizar la transición al ofrecer el equipo adecuado, tu apoyo y aliento, y muchos elogios y refuerzo positivo.
Mi nombre es Daniel. Soy médico pediatra y me estoy especializando en neonatología. Soy apasionado por los deportes y la salud alimenticia. Asistí a importantes nutricionistas especializados en deportes de alto rendimiento.
Redacto en mis tiempos libres. Creo firmemente que compartir información sobre salud y bienestar es vital para colaborar con la comunidad de padres.
Me gradué en la Universidad de Buenos Aires, en la Facultad de Medicina. Realicé prácticas y asistencias en Barcelona, España. Asistí a entrenadores de alto rendimiento deportivo en diferentes clubes de natación de competición nacional.